¿Conoces esa sensación cuando tienes un sueño, no paras de pensar en ello, pero lo vas dejando y nunca haces nada para hacerlo realidad? Te parece que nunca se cumplirá, tienes miedo al fracaso, a lo que pensará la gente si lo intentas y no lo consigues… Estoy segura de que sabes de qué estoy hablando. Pues bien, este año, será tal vez porque me voy acercando peligrosamente al cambio de década (¿estaré ya en la crisis de la cuarentena?), me decidí a intentar alcanzar mi sueño: lanzar este blog y empezar a fotografiar familias. Me encanta fotografiar a mi familia, claro está. En ella encuentro la inspiración y ellos sacan lo mejor de mí. Aun así, como amante de la fotografía, hacer fotos más allá del círculo familiar era algo que realmente deseaba y, poquito a poco, está empezando a hacerse realidad.
Mi primera sesión de fotos de familia
Hoy te quiero hablar de mi primera sesión de fotos de familia, una sesión que, por ser la primera, siempre será muy especial. Estoy convencida de que la familia de Alex y Bárbara te va a cautivar: son el ejemplo perfecto de una familia multicultural moderna. Alex es griego y suizo y tiene dos hijos guapísimos y morenazos de su anterior matrimonio. Bárbara es alemana y juntos tienen dos niñas preciosas: una ha heredado los genes bávaros de la madre y la otra, los genes mediterráneos del padre. Está claro que es la familia ideal para fotografiar.
Tenía bastante claro lo que quería conseguir en la sesión. Me encanta la luz natural y la fotografía documental y lifestyle, así que ese era el tipo de fotos que quería hacer, aunque confieso que tenía un poquito de miedo a que no salieran como quería. Al fin y al cabo, era mi primera sesión y había tenido una cesárea unas semanas antes. No sé si conoces bien la fotografía lifestyle: el planteamiento es bastante diferente al de una sesión en estudio a la que uno va con sus mejores galas, bien peinado y el fotógrafo capta posados más o menos espontáneos. En fotografía lifestyle, la sesión tiene lugar en tu casa o en un lugar en el que te sientas totalmente cómodo y puedas ser tú mismo. Esto le permite al fotógrafo documentar tu vida de familia y captar la belleza de los pequeños momentos del día a día.
Lo que yo quería era plasmar en foto la personalidad de los niños de Alex y Bárbara, cómo interactúan entre ellos en su ambiente natural, qué hacen un día cualquiera. Creo que este tipo de fotografía “no posada” refleja momentos, sentimientos y situaciones del día a día de una manera muy auténtica y emotiva. Son esas fotos que, cuando las miras unos años más tarde, te teletransportan al momento en el que tus hijos eran pequeños.
Eso es lo que intenté hacer en casa de Alex y Bárbara. Por eso la mayor parte de la sesión giró en torno a lo que más les gusta a toda la familia: la música. Alex, además de muchas otras cosas, es un músico excelente y les ha transmitido su pasión a sus hijos. En su casa, el piano ocupa un lugar preponderante. Tanto Alex como sus dos hijos mayores tocan el piano y las peques bailan mientras ellos tocan. No te puedes imaginar lo emocionante que fue hacerles fotos mientras estaban tocando. Pura magia.
También les fotografié mientras leían, jugaban en el jardín, cuando las peques se cambiaban una y otra vez de vestido (ya sabes lo que les gusta eso a las niñas, al menos a la mía) y cuando su madre las peinaba.
Como quería usar solo luz natural, no utilicé flash y, al principio de la sesión, no fue nada fácil porque el día salió bastante gris. Aun así, lo que parecía que iba a ser un problema se convirtió en una oportunidad para hacer algunas fotos en clave baja que, en mi opinión, reflejan muy buen el día a día.
Aún me queda muchísimo por aprender, pero estoy muy agradecida y orgullosa de poder haber hecho mi sueño realidad con una familia tan bonita. Y, en lugar de seguir hablando sobre lo que hice o dejé de hacer, aquí te dejo algunas de las fotos de la sesión. Al verlas, seguro que entenderás mejor cuando decía que son “la familia perfecta”.
Enhorabuena Marta! Geniales! Es q hace tanta ilusión fotografiar y dejarles un recuerdo desde tu mirada personal a otras personas que cuando les tocas el corazón dejándoles recuerdos para toda la vida te sientes feliz! Aunq los nervios antes de la sesión a modo de mariposas son inevitables. Al menos para mi. Yo estoy pendiente también d animarme con un blog pero no arranco. Mucho ánimo! Y gracias por compartir! 🙂